Los pinchazos siempre ocurren en el momento menos pensado y en el lugar más inadecuado pero con los neumáticos Run Flat puedes volver a casa de forma segura y sin necesidad de bajarte del coche en el arcén arriesgando tu seguridad.
Los neumáticos Run Flat son aquellos que continúan funcionando en caso de una perdida de presión rápida y repentina en la rueda. Soportan el peso del vehículo gracias al gran refuerzo de su costado. Gracias al diseño especial de su talón, se evita el desllantado, es decir, que el neumático se separe de la llanta. El relleno del talón está hecho de un tipo especial de caucho que combate la acumulación del calor.
En caso de pinchazo, el lateral reforzado de las ruedas Run Flat asegura la conducción hasta 80 kilómetros, a una velocidad máxima de 80 Km/h.
1. Seguridad
2. Comodidad
3. Ahorro
Los fabricantes recomiendan montar los neumáticos Run Flat solo en vehículos equipados originalmente (tanto de serie como en opción) con este tipo de ruedas.
Los coches que pueden llevar ruedas Run Flat (de serie o en opción) siempre deben estar equipados con un Sistema de Control de Presión de Neumáticos o TPMS. Este sistema incluye sensores en el interior de los neumáticos. Tan pronto como disminuya la presión, el sistema lanzará un aviso para conducir más despacio, sin superar los 80 Km/h. Los especialistas de First Stop ofrecerán toda la información necesaria y ayuda para cambiar los neumáticos si fuera necesario.
Sí, las ruedas Run Flat deben comprobarse periódicamente en busca de pinchazos, desgaste o deterioro, por si fuera necesario cambiar los neumáticos, al igual que en cualquier otro tipo de ruedas. No hay que olvidar que es recomendable verificar la presión de los neumáticos una vez al mes.
No, porque al no notar ningún cambio en el comportamiento del vehículo puedes no darte cuenta de que has pinchado.
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